El 16 de noviembre arranca el Plan de Traslado al nuevo Hospital Universitario de Toledo
Así lo anunciaron el martes el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page y el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz en un acto celebrado en el Palacio de Fuensalida al que asistió el secretario general del Colegio de Médicos de Toledo, Dr. Raúl Calvo
El Plan de Traslado al nuevo Hospital Universitario de Toledo arrancará el 16 de noviembre y se prolongará hasta principios del mes de junio del año que viene. Asi lo anunció el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ante el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Al acto, que se celebró en el Palacio de Fuensalida, también asistieron la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, el presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, representantes del SESCAM y de Colegios Oficiales del ámbito sanitario, entre ellos, el secretario general del COMT, Dr Raúl Calvo.
Durante la presentación, Fernández Sanz indicó que el desarrollo del traslado se ha planificado en dos fases diferenciadas por la complejidad de la actividad asistencial y la autonomía de las áreas a trasladar. Así, en la primera fase se han incluido áreas asistenciales con actividad ambulatoria y de un nivel de complejidad baja o media/baja, además de servicios no asistenciales como áreas administrativas y de gestión.
Asimismo, y según informa la Junta, a la hora de definir las áreas que se trasladan durante esta fase se han tenido en cuenta cinco criterios fundamentales. En primer lugar, que la actividad sea relativamente autónoma y no altamente dependiente de servicios aún no trasladados; que la actividad pueda llevarse a cabo con seguridad para los pacientes y los profesionales; la irreversibilidad, es decir, que el área que se traslada cesa su actividad en el hospital de origen; una distribución razonable para aprovechar sinergias y consenso con los profesionales implicados.
Dos fases
Dentro de la primera fase se han diferenciado a su vez dos etapas. La etapa 1, en la que se han incluido las áreas de Rehabilitación, Consultas de Medicina Interna; Consultas de Reumatología, Consultas de Endocrinología, Consultas de Anestesia, Hospital de Día Médico y Unidad Metabólica. Ya en la segunda etapa, se procederá al traslado de las Consultas de Dermatología, Digestivo, Neumología, Neurología y de Pediatría y sus especialidades.
El Plan de Traslado previsto contempla el inicio del traslado del primer servicio (Rehabilitación) en el periodo comprendido entre el 16 de noviembre y el 4 de diciembre. Con una cadencia de más o menos una semana, se irá produciendo el traslado de todas las áreas mencionadas anteriormente, finalizando esta primera fase en la semana del 22 al 26 de febrero, con el traslado de las Consultas de Pediatría y sus especialidades.
En la segunda fase se han incluido el resto de áreas asistenciales que realizan actividad ambulatoria así como no ambulatoria y con un nivel de complejidad medio y alto. En este caso se han seguido igualmente criterios de seguridad, irreversibilidad, distribución física y consenso con los profesionales a la hora de definir el orden de las áreas que se trasladan.
Además, se han diferenciado tres etapas: en la primera se ha previsto el traslado de los servicios de Diagnóstico por Imagen, Laboratorios y Farmacia; en la etapa dos, el resto de Consultas Externas, Diálisis, Hospitales de Día Oncohematológico y Pediátrico, Bloque Obstétrico y Esterilización, Hospitalización Pediátrica, Hospitalización Gineco-Obstétrica, UCI Neonatal y Pediátrica. Y, finalmente, en la tercera etapa, las áreas de Hemodinámica, Hospitalización convencional, UCI adultos, Bloque Quirúrgico y URPA y Urgencias.
El inicio del traslado de los primeros servicios incluidos en esta fase (Diagnóstico por la Imagen y Laboratorios) está previsto que se lleve a cabo entre el 12 y el 23 de abril. Igualmente, y con una cadencia de más o menos una semana, se irá produciendo el traslado de todas las áreas mencionadas con anterioridad, finalizando la segunda fase en la semana del 24 de mayo al 4 de junio, con el traslado de las Urgencias.
Oficina de Gestión del Traslado
El consejero ha señalado que, debido a la complejidad del proceso y con el objetivo de asegurar la calidad, eficacia, participación y consenso en el desarrollo del traslado, se ha creado la Oficina de Gestión del Traslado, que se encargará de establecer estrategias de actuación, así como dirigir, supervisar y coordinar la realización y desarrollo de los trabajos y planificar las actuaciones. De esta oficina forma parte el equipo directivo del Complejo Hospitalario Universitario de Toledo, así como del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha y de la Oficina de Seguimiento de la Concesión.
También ha recordado que ya se han constituido cuatro grupos de trabajo integrados por personal sanitario y no sanitario del hospital, que centrarán su cometido en el diseño de Circuitos, traslado de Servicios Asistenciales, Servicios no Asistenciales y Mudanza, en los que llegarán a participar más de un centenar de profesionales.
Finalmente, ha explicado que en el diseño de este plan de traslado se han tenido en cuenta diversos requisitos para garantizar el mantenimiento de la actividad del hospital y optimizar los recursos involucrados en el traslado, minimizando la duplicación, velando por la seguridad clínica de los pacientes y evitando la sobrecarga de trabajo de los profesionales durante todo el proceso.
“La operación más compleja”
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha calificado el traslado como la “operación más compleja” de la historia de la Comunidad Autónoma en el ámbito sanitario, que “supone una inversión descomunal” desde el punto de vista económico, de la energía e incluso “desde el punto de vista jurídico y urbanístico”.
Según el jefe del Ejecutivo regional el Plan de Traslado es una “operación delicadísima, verdaderamente difícil y compleja” que el Gobierno de Castilla-La Mancha llevará a cabo “prudentemente, paso a paso”. Para ello, “hay más de 60 especialistas implicados en su planificación, programación y gestión ” y ha añadido que se trata de “una operación de meticulosa preparación y de altísimo riesgo” que “ha requerido meses de estudio técnico y científico”.
Asimismo, el presidente ha advertido que “si la situación del COVID se complicara, está prevista la contingencia, y se paralizaría” subrayando que “no vamos a poner por delante el edificio a la necesidad del virus” y ha recordado que la pandemia, actualmente “bajo control”, provocó “una paralización administrativa y legal” en diversos trámites que afectaron al desarrollo del Hospital Universitario de Toledo.
Durante su intervención, García-Page se refirió a las peticiones de apertura del nuevo Hospital Universitario de Toledo en medio de la pandemia indicando que “solo a gente muy temeraria se le hubiera ocurrido mandar a todos los profesionales a hacer una mudanza”. En esta línea, abundó que “no tiene lógica” y que “hubiera habido consecuencias fatales para la vida y la seguridad de mucha gente”.
Finalmente, el secretario general del Colegio de Médicos de Toledo ha calificado la próxima apertura del nuevo hospital de Toledo como un proyecto ilusionante, pues pondrá a disposición de los profesionales y de los usuarios mejores instalaciones, equipamientos y herramientas diagnósticas de última generación, lo que redundará en la mejora de la calidad asistencial.