Dr. Raúl Calvo: “El Código Deontológico es el faro que permite a nuestra profesión navegar en las tormentas. La pandemia está siendo un auténtico huracán”

El secretario general del Colegio de Médicos de Toledo ha participado en el VII Congreso de Deontología del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos que inició su andadura en la entidad colegial el pasado fin de semana y que se prolongará los días 23 y 24 de abril

El Dr. Calvo Rico resalta en esta entrevista la importancia de celebrar estos eventos  ya que  “para su Junta Directiva, este Congreso es la culminación de la apuesta que hicimos desde que comenzamos a dirigir el COMT por la Deontología Médica, y que iniciamos con una profunda renovación de nuestra Comisión Deontológica, haciéndola más numerosa, con un nutrido grupo de expertas y expertos”.

¿Qué supone para la profesión médica celebrar este Congreso de Deontología en un año marcado por la pandemia?

Durante el último año los y las médicas hemos dedicado todos nuestros esfuerzos a luchar contra la mayor crisis sanitaria de los últimos 75 años, por lo que tiene de global, de no haber respetado fronteras, de haber amenazado nuestros modos de vida y haber hecho tambalearse a nuestros sistemas sanitarios e incluso hasta nuestro estado del bienestar.

Más de cien compañeras y compañeros han perdido sus vidas en esta lucha si cuartel, cientos, miles han sufrido en mayor o menor medida la enfermedad y sus secuelas, y todos sin excepción se han visto sometidos al impacto psicológico que supone el miedo por nosotros mismos y nuestras familias, y el sufrimiento de nuestros pacientes.

Tener la oportunidad de reunirnos para hablar, para debatir, para resolver nuestras dudas y seguir trabajando sin perder el ancla que nos mantiene firmes ante tanta tormenta, nuestra deontología y ética médica, es una alegría y un estimulo para todos.

¿Y para el Colegio de Médicos de Toledo?

Para esta Junta Directiva, este Congreso es la culminación de la apuesta que hicimos desde que comenzamos a dirigir este Colegio por la Deontología Médica, y que iniciamos con una profunda renovación de nuestra Comisión Deontológica, haciéndola más numerosa, con un nutrido grupo de expertas y expertos dirigidos por una figura de reconocido prestigio, expresidente de la OMC y presidente de la Comisión Deontológica Central, el doctor Juan José Rodríguez Sendin.

Así mismo, en las tres ediciones que celebramos de nuestro Congreso de Medicina Joven (la cuarta hubo de suprimirse por la pandemia), realizamos un novedoso concurso de casos clínicos deontológicos de gran éxito entre los y las médicas más jóvenes.

No podíamos encontrar mejor colofón a una legislatura tan comprometida con la Ética y la Deontología Médica que la celebración de este VII Congreso que, con la participación de médicos de Portugal y de varios países de la América Latina se convierte de facto en Congreso Iberoamericano.

Uno de los ejes de este Congreso es abordar los planteamientos éticos y deontológicos surgidos a los profesionales médicos en esta crisis sanitaria, ¿Considera que la pandemia puede influir en la línea deontológica de la profesión médica?

El Código Deontológico es el faro que permite a nuestra profesión navegar en las tormentas a las que se ve sometida. La pandemia no es que haya sido una tormenta, ha sido y está siendo un auténtico huracán, que nos zarandea a todos los colectivos profesionales, y en general a toda la sociedad y sus estructuras. Nosotros nos sentimos afortunados de tenerle para guiarnos ante los retos a los que debemos enfrentarnos.

Lo que ha hecho esta pandemia es poner de manifiesto una serie de aristas y problemas éticos a los que, o bien nunca habíamos tenido que enfrentarnos, o si lo habíamos hecho, había sido a una escala que nada tiene que ver con la actual. Y eses es auténticamente nuestro reto: analizar esas aristas y problemas, debatir sobre ellas y su encaje en nuestra ética médica.

Desde su punto de vista, ¿Qué cambios considera necesarios para dibujar el futuro de la Deontología Médica?

La OMC a través de su Comisión Deontológica Central hizo un gran esfuerzo para renovar el Código Deontológico, demostrando que éste no es una serie de normas grabadas en piedra, sino algo vivo, como nuestra propia sociedad. Los cambios a los que ésta se ve sometida, suponen en muchos casos nuevos desafíos para nuestra profesión y si no tuviéramos “cintura” para reflejar dichos cambios sociales, el Código perdería su valor como guía y referencia.

Este siglo XXI ya antes de la pandemia vivía un ritmo frenético de cambios en brazos de avances tecnológicos inigualables a lo largo de la historia. Pero es que la crisis sanitaria global ha amenazado nuestros sistemas de salud, nuestro bienestar, nuestros logros sociales. Nos está llevando a límites que nos vemos obligados a explorar con pies de plomo pero sin perderle la cara a los problemas que generan.

¿Cuáles han sido las principales cuestiones éticas a las que se han enfrentado los profesionales médicos durante la crisis sanitaria?

En mi opinión, los más importantes van a ser precisamente tratados en ls distintas mesas de este Congreso: la necesidad de establecer prioridades en la asistencia sanitaria para asegurar que ésta llegara a la mayor cantidad posible de gente sin colapsar irremediablemente, la deshumanización a la que nos vimos abocados en algunos casos impelidos por las drásticas medidas de control de la pandemia; el reprobable abandono que han sentido algunos enfermos, la necesidad de que las y los gestores médicos se sientan sometidos a la hora de tomar sus decisiones a sus obligaciones como médicos, y la irrupción de la telemedicina y la e-consulta y sus implicaciones para profesionales y pacientes.

Durante la pandemia ha existido la necesidad de priorizar la asistencia sanitaria, ¿Qué implicaciones éticas y deontológicas conlleva para los profesionales médicos?

Será éste uno de los principales temas a tratar durante el Congreso, precisamente en la mesa en la que yo mismo actuaré como moderador y cuyos ponentes son sin duda dos de los profesionales más indicados para responder a estas preguntas, Rodrigo Gutierrez, que ha sido uno de los responsables ministeriales durante la crisis sanitaria, y Pilar León, miembro de la Comisión Deontológica Central. Se trata de un tema delicado, decisiones a tomar por parte de profesionales y gestores que no pueden en ningún caso dejar indiferente, y que, aun siendo responsables y tomadas si olvidar el Código Deontológico y por el bien común, generan un enorme sufrimiento. Hablar y debatir sobre ello nos enriquecerá sin lugar a dudas.